Su historia de amor con la traducción y la mediación lingüística empezó durante sus estudios de filología inglesa en su Barcelona natal, y continuó con su trabajo en el ámbito de la acción sindical en el seno colectivos migrantes en Alemania, donde residió durante casi una década.
Sus lenguas maternas son el catalán y el castellano, y traduce del inglés y el alemán. Su interés por la economía política la trajo de vuelta al Estado español para formarse en ese sentido, especializándose en economía feminista y teoría económica heterodoxa. A nivel micro, le apasionan las prácticas concretas de economía transformadora, el cooperativismo y la autogestión, lo que convierte para ella Guerrilla Translation en un espacio de trabajo y activismo perfecto para la construcción de alternativas políticas, sociales, económicas y laborales, dignificando un sector acechado por la precariedad.