Transición hacia el procomún y P2P: guía básica
Michael Bauwens, Vasilis Kostakis, Stacco Troncoso y Ann Marie Utratel Traducido y editado por Guerrilla Translation El procomún, como idea y como
Michael Bauwens, Vasilis Kostakis, Stacco Troncoso y Ann Marie Utratel Traducido y editado por Guerrilla Translation El procomún, como idea y como
La crisis ecológica del mundo contemporáneo se ha gestado durante cinco siglos de desarrollo capitalista. Los acuerdos que sustentan ese sistema se encuentran sumidos en una crisis sin precedentes.
Nuestra versión moderna del capitalismo no es más que un cuento. Y ese cuento ni es el único ni es inherente a nosotros. Un vídeo animado de TheRules.org
El procomún es más un proceso que un objeto, un proceso que consiste en las prácticas sociales y las normas que ayudan a una comunidad a gestionar un recurso para el beneficio colectivo. Las formas de construir un procomún (commoning) varían porque la humanidad es en sí misma muy diversa.
«Los niveles de innovación requeridos para evitar el colapso no solo son muy poco realistas en un sistema basado en el crecimiento, sino que es la ética del lucro la que genera precisamente los problemas que hoy afrontamos.»
“¿Podemos mantener nuestros corazones revolucionarios ardiendo con la esperanza de un futuro liberado cuando el sistema es tan competente a la hora de ignorar y asfixiar nuestros esfuerzos, e incluso cuando nuestros movimientos se autodestruyen por nuestros propios fallos y nuestra cobardía?”
“La banca privada puede crear dinero de la nada”. En esencia, ese es el mensaje de unas declaraciones recientes del Banco de Inglaterra que tiran por los suelos los fundamentos teóricos de la austeridad.
En este vídeo y el artículo corto que lo acompaña, el profesor Richard D. Wolff, experto en cooperativas y economista heterodoxo estadounidense explica los motivos por los que el crecimiento ha adquirido tal protagonismo en nuestros sistemas políticos.
Dmytri Kleiner, comunista de riesgo y especialista en tecnologías de descomunicación, intenta dar respuesta a la siguiente pregunta: ¿Cómo vamos a crear empresas para beneficiar al procomún si no disponemos de capital para ponerlas en marcha?
Charles Eisenstein analiza detenidamente las consecuencias económicas y legales de una ley anti-ecocidio. Es evidente que hay que proteger al planeta pero, si nuestros sistemas económicos y legales no son compatibles con una ley así, ¿no deberíamos plantearnos cambiarlos?
«En esta época de crisis climática y colapso económico, de los resquicios de la supremacía blanca y el patriarcado, la lucha tiene tanto que ver con la resistencia como con los programas de supervivencia comunitaria, tanto con desmantelar la industria de los combustibles fósiles, como con la descolonización de nuestras propias mentes.»
A veces una acción silenciosa y modesta encierra una visión del mundo transformadora, tanto por lo radicalmente distinta como por la coherencia que encierra…una historia que se explica por sí misma, una protesta que se sale de la dinámica de la acción-reacción para adelantarse, para crear realidades distintas.